Caminante no hay camino, se hace camino al andar

Buenas! Aquí estoy nuevamente! :)

Wow... Nunca pensé en sentarme a escribir por aclamación de mis lectores, pero así es y este post va dedicado a mi amiga Vero, una de las mejores personas que la vida me regalo. Me costó un poco elegir el título, y si bien creo que tal vez sea un poco trillado, no por eso es menos verdadero.

La realidad es que no sabemos lo que nos espera sino andándolo, y recorriéndolo y yo soy de la gente que tiene la firme convicción de que el trayecto es parte del viaje. Así es que, como ya dije, nunca pensé, con mi primer post que hubiera alguien, esperando leer un segundo y otros sucesivos. Nunca pensé al crear este blog que fuera a trascender los límites de este TRAL que nos convoca y pensando en torno a esto, tampoco nunca pensé que algún dpia fuera a viajar a Rusia (y lo hice), nunca pensé que fuera a formar amistades transoceánicas (y las tengo de las mejores) y así siguiendo.

Siempre repito que lo que diferencia a un adulto de un niño es que el adulto pierde su capacidad de asombro, frente a situaciones que naturaliza... Ahora díganme... no es sorprendente que sin habernos visto nunca ustedes me estén leyendo? A mi cuando menos me hace cosquillas en la panza y deseo que nunca deje de pasarme.

Sólo para aquellos que esperaban leer algo más de mi viaje, les cuento una curiosidad sorprendente. En Rusia, tal como todos vimos algunas vez en los dibujitos animados, los pescadores abren un agujerito en el hielo y a través de él meten el hilo de la caña de pescar y pescan... sí, aunque no lo crean se ve que hay pececitos que sobreviven a esas temperaturas heladas! Les dejo una foto, por si aun no me creen :)

Cualquier semejanza con la realidad... es pura coincidencia.

Nos leemos muy pronto. Saludos a todos,